Sólo nos separaban 250 kilómetros del fin de este rally. Había una especial de tan sólo 29 kilómetros, que como siempre no ayudaría a variar las clasificaciones, pero no había que bajar la guardia porque una avería inoportuna puede echa atrás todo el rally y no subir al podium. Así que nos repartimos para cada uno de los vehículos de asistencia acompañaba a cada auto de carreras durante el recorrido del enlace hasta casi el podium. Yo junto con otros 5 integrantes del grupo nos adelantamos a Lima para ir organizando la llegada de todos. Me dio tiempo para subir al Podium y acompañar a Miguel en la recogida de su SEPTIMA medalla consecutiva “BRAVO MIGUEL Y EL EQUIPO DE HIMOINSA TEAM”. Manolo no podo llegar a tiempo ya que acompañó al 333 durante su recorrido de hoy por si tenía alguna avería. Anecdótico se queda su 24 posición en la especial de hoy, quedando definitivamente en el puesto 63 de la general.
Con respecto a los coches el 333 quedó en el 32º y el 387 en el 54º de la general. También muy importante para el equipo Chengdú Rural Comercial Bank poner a sus coches en el podium, desde los problemas que tuvimos durante las últimas etapas.
Todo Lima es un fervor de gente, las calles del centro cortadas sólo para este evento, incluso hay gente de la ciudad que comenta que es el acontecimiento deportivo más importante que ha pasado por Lima y Perú en muchos años.
Ya para terminar quisiera hacer una serie de reflexiones y agradecimientos.
Para mí ha sido una experiencia muy interesante y satisfactoria, no en sí por el tema de la competición sino por el día a día, el convivir con gente de otras nacionalidades, no lo he dicho pero dentro del equipo había franceses, polacos, alemanes, chinos, italianos, argentinos y españoles (Manolo y yo), el cada día ver cosas diferentes, trabajar en equipo, cosa muy importante en esto sitios.
En 15 días hemos atravesado 3 países muy diferentes entre sí. Argentina fue la que menos me sorprendió porque me la esperaba tal cual ha sido, tanto la gente como la cultura, la verdad es que era de la que más me habían hablado. Gente fanática del motor y la que no es fanática sólo salía para llenar las calles y ver pasar a los autos de carreras.
La que más me sorprendió fue Chile, gente muy seria y correcta, además de un país con mucho auge y muy moderno. Creo que con un futuro importante.
Sobre Perú, no me lo esperaba así, sólo con recorrer 50 kilómetros desde la frontera de Chile a Perú, ya se notaba el cambio tan radical de sociedad. Los primeros 1.000 kilómetros de Perú fueron por auténtico desierto, conforme te acercas a Lima va cambiando todo. Según nos dijeron, casi todo de Perú se concentra en Lima.
Eso sí, como ya comenté en los días anteriores, ver el desierto que termina justo en la orilla del mar es algo precioso para mí, y si lo juntas que la carretera se desarrolla, a veces, a 10 metros del mar con la falda de la duna, mucho más impresionante. Todo ello siendo playas prácticamente vírgenes.
Seguro que se olvida muchas cosas de las vividas aquí, hay tantas que no las puedo explicar todas y menos escribirlas porque esto de escribir tampoco es lo mío.
Para terminar con todo lo que he escrito en estos emocionantes 15 días, quisiera AGRADECER el apoyo que he recibido para venir de mis padres, mi hermano, mi tío Pepe, mi amigo Monchu, mi familia política, a todos los que me han apoyado y en especial de mi hija Mercedes y a mi mujer Lola, que estando embarazada de 7 meses también ha hecho un esfuerzo estas casi 3 semanas que he estado fuera. GRACIAS.
Quisiera hacer otro agradecimiento especial a Manolo Díaz, primero, por haberme invitado a participar en su camión en este Rally, y segundo, por haberme enseñado tantas cosas sobre este mundo, dada de su experiencia en 9 dakares.
Y gracias a las empresas que me han ayudado de una forma o de otra para poder vivir esta experiencia a Rodial, D.O. Manchuela, Gasóleos Sánchez y Murcia, Circuito de Albacete, Autoescuela Paños, Consejeros de Mercancías Peligrosas y Transportes Santiago Peñaranda.
GRACIAS A TODOS
|