Objetivo cumplido: Ya estamos en Buenos Aires.
Sólo ha faltado que José Luis Espinosa "Caballero Negro" terminase, pero como dije la semana pasada, no pudo tomar la salida de la tercera etapa con su Quad. Hemos llegado el sábado 14 de enero a las 17:00 a Buenos Aires, después de más casi 10.000 kms recorridos desde que llegamos el 27 de Diciembre con calor, frío, lluvia, altura ....
El pasado lunes 9 de enero salimos de La Paz (Bolivia) dirección Tupiza, donde era etapa maratón para los competidores y para las asistencias, ya que los pilotos durante la noche del lunes no podían recibir asistencia mecánica ninguna y nosotros teníamos que recorrer casi 1.300 kms cruzando la frontera y pasando por puertos de montaña de más de 4.000 metros de altitud, llegando en alguno a los 4.300 metros.
La primera jornada de la segunda semana del Rally fue la salida de La Paz donde tardamos casi 2 horas por los espectadores que había para despedir a la caravana del Dakar y por el tipo de vía por la que debíamos salir puesto que para abandonar La Paz hay que subir toda la montaña hasta alcanzar El Alto y el Altiplano con rampas de más del 20% y abarrotadas de público.
Camino de Tupiza pasamos por Potosí y llegamos al Bivouac a la 1:30 de la noche después de 800 kms de montaña.
El martes salimos de Tupiza dirección Salta: Un recorrido de 500 kms en principio fácil con un recorrido por el Altiplano entre 3.500 y 4.000 metros de altitud,con el paso de frontera a Argentina, que llevaría, según la organización, unas 9 horas recorrerlo con los camiones de asistencia.
Pero esa mañana hubo un desprendimiento de montaña en la zona del Volcán Lanin (por el que teníamos que atravesar) y la caravana se quedó bloqueada a 200 kms al norte de Salta en un pueblo llamado Maimara. Esa tarde fue todo un caos. La organización dio una ruta alternativa para los competidores y asistencias donde solo podían pasar los vehículos 4x4.
Así que las caravanas y algunos vehículos grandes no podían pasar. Digo que fue un caos porque muchos equipos se partieron ya que algunos vehículos tomaron la ruta de la organización y otros se quedaron un Maimara. Por ese motivo la etapa para los pilotos del día siguiente Salta-Chilecito se suspendió. Los miembros del Fiora Dakar Team, que tiene como piloto a Sergio Anguiano y a nosotros como asistencia, decidimos quedarnos en Maimara y pasar la noche a la orilla de la carretera durmiendo en la cuneta con las tiendas rodeando la moto para evitar robos.
A la mañana siguiente salimos camino de Salta con el camión y la furgoneta 4x4, llevándonos en el camión a Miguel Puertas, manager del Himoinsa Racing Team y en la furgoneta a dos de sus mecánicos, porque como he dicho antes algunos equipos se vieron disgregados la tarde anterior. El recorrido fue por la pista que la organización propuso. Fueron 330 kms de pista rota con subidas y bajadas, donde alcanzamos los 4.500 metros de altitud, cruzando montañas, acantilados y con paisajes increíbles que no los hubiéramos visto sin este desgraciado percance.
Una vez llegados a Salta cogimos rumbo a Chilecito donde habían otros 700 kms. Donde primero tomamos la Ruta 68 con paisajes preciosos e inigualables de la Quebrada de Las Conchas. Después tomamos la Ruta 40 que recorre la Cordillera de los Andes. Llegamos al Bibouac a las 12:30 de la noche, después de salir a las 6:00 de la mañana. La caravana del Fiora Dakar Team salió de Maimara a media mañana y llegó al Bibouac a la 1:00 pero con el susto en el cuerpo. 50 kms antes de San Juan tuvo un accidente, se les cruzo una llama y destrozando la luna delantera además de varios desperfectos en la carrocería.
El día siguiente Jose y Choca tuvieron que ir a San Juan sin luna delantera, era un cuadro verlos, además de que aún no se le había quitado el susto del cuerpo.
La etapa del día siguiente Chilecito-San Juan fue dura en el sentido que volvía el calor, mucho calor, donde la Ruta 40 fue la que nos llevó al destino por un paisaje desértico aplastado por el calor.
Fueron 450 kms llegando al Bivouac de San Juan sobre las 17:00 horas. El Aeródromo de San Juan nos acogió un año más a la caravana del Dakar. Sergio por su parte iba haciendo un pilotaje de su Ktm 450 exquisito y con una solidez que le caracteriza, terminando las etapas sin problemas mecánicos considerables y entre los puestos 60-70, para un Rockie es una muy buena posición.
La penúltima etapa San Juan-Río Cuarto fueron 566 kms de interminables rectas y ninguna población en cientos de kilómetros. Los primeros 300 kms se hicieron cruzando el desierto de Encon y el Parque Nacional de La Sierra de las Quijadas. La hicimos, como algunas anteriores jornadas, junto con Manolo Diaz y su Scania 6x6 de asistencia del Himoinsa Racing Team. Es un apoyo mutuo en estos largos e inhóspitos recorridos ir con un amigo al lado donde puede ocurrir cualquier contratiempo y poder solventarlo entre todos.
En lo deportivo esta etapa era la que decidiría el resultado final de las categorías. En lo que concierne a nuestros compañeros y amigos de Himoinsa Racing Team Gerard Farrés se puso tercero en la clasificación de motos terminando así el Dakar 2017 siendo la primera moto privada que sube al podium y aquí mi más sincera felicitación.
Para concluir el recorrido final, la última etapa fueron 680 kms entre Río Cuarto-Buenos Aires donde, como siempre, la gente de Buenos Aires se volcó a las calles para recibir a toda la caravana. El recorrido cruzaba amplios prados verdes de la zona de Villa María cogiendo la RN9 que nos llevaba diez horas después de la salida al Circuito de Buenos Aires donde aparcamos el camión para posteriormente llevarlo al puerto de Campana y embarcarlo en el Ferry que lo llevará a Le Havre sobre el 20 de febrero donde tendremos que recogerlo.
El resumen de estos 20 días es que hemos pasado calor, mucho calor, frío, lluvia, mal de altura y cansancio pero todo lo compensa en haber llegado a Buenos Aires sanos y salvos y haber compartido esta experiencia con Tomás, lo miembros del Fiora Dakar Team (Jose, Miguel, Javi, Choca, Sergio y su mujer Sara), Manolo Diaz, Puertas, Jose Luis Espinosa y Luis, que aunque estos últimos se volvieron para España demasiado pronto estuvimos trabajando codo con codo en el quad tanto la semana de Asunción como hasta la tercera etapa.
Quiero agradecer desde aquí el apoyo que he recibido, no sólo durante el Dakar sino los meses antes de hacerlo, a mi mujer Lola, a mis padres, a mi tío Pepe (que se quedó con las ganas de venir pero otra vez será), a mi hermano y amigos como Monchu y Alicia (mujer de Manolo Díaz) que siempre ha estado al otro lado del teléfono en España para cualquier duda o problema que hemos podido tener tanto Manolo como yo. También quiero agradecer a quien me ha ayudado a poner el camión en Buenos Aires como Talleres Juan y Enrique de MAN, talleres Zuñiga, Electromecánica Juan Gómez Moraga, grupo Fustel, Felitronic de La Roda, transportes Santiago Peñaranda y Grupo Mesas.
A pesar de todo lo que hemos pasado como dice mi mujer y mi madre "Palos a gusto no duelen" y si Dios quiere el año que viene repetimos.
Un abrazo.
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